Cuando compliques tu existencia con preocupaciones,
y te parezca que la vida es dura, injusta y la gente ingrata;
cuando siempre te enamores de quien no te ama,
y tu pareja sea la persona equivocada;
cuando siempre esté más verde el césped del vecino,
Y sólo llueva cuando no llevas paraguas;
cuando, en definitiva, más que un ser humano,
seas un problema antropomorfo,
date prisa, y soluciónate,
pon en marcha tus nociones algebraicas.
Cuando sólo veas maldad en los ojos del extranjero,
y la gente siempre quiera ofenderte o ponerte trabas;
cuando te parezca que todo es difícil,
o que siempre tienes tan mala suerte,
que lo único que te toca es la desgracia,
es urgente, que armado de calculadora,
soluciones el problema en el que,
a base de magia negra,
tú mismo te has transformado.
Cuando te parezca que la vida es una partida de ajedrez
contra un Kasparov ruso o un ordenador superdotado;
cuando hasta durmiendo tengas que luchar contra fantasmas,
mírate al espejo, reconoce que lo que se refleja
más que un rostro de mujer - de hombre, si es tu caso –
es una ecuación de segundo grado,
es un logaritmo en base imaginaria,
un enunciado en el que dos trenes, a distintas velocidades,
se cruzan en un punto X del mapa.
Date cuenta,
no pierdas el tiempo resolviendo problemas
que tú mismo has creado,
soluciónate
y obtendrás siempre mejores resultados.
y te parezca que la vida es dura, injusta y la gente ingrata;
cuando siempre te enamores de quien no te ama,
y tu pareja sea la persona equivocada;
cuando siempre esté más verde el césped del vecino,
Y sólo llueva cuando no llevas paraguas;
cuando, en definitiva, más que un ser humano,
seas un problema antropomorfo,
date prisa, y soluciónate,
pon en marcha tus nociones algebraicas.
Cuando sólo veas maldad en los ojos del extranjero,
y la gente siempre quiera ofenderte o ponerte trabas;
cuando te parezca que todo es difícil,
o que siempre tienes tan mala suerte,
que lo único que te toca es la desgracia,
es urgente, que armado de calculadora,
soluciones el problema en el que,
a base de magia negra,
tú mismo te has transformado.
Cuando te parezca que la vida es una partida de ajedrez
contra un Kasparov ruso o un ordenador superdotado;
cuando hasta durmiendo tengas que luchar contra fantasmas,
mírate al espejo, reconoce que lo que se refleja
más que un rostro de mujer - de hombre, si es tu caso –
es una ecuación de segundo grado,
es un logaritmo en base imaginaria,
un enunciado en el que dos trenes, a distintas velocidades,
se cruzan en un punto X del mapa.
Date cuenta,
no pierdas el tiempo resolviendo problemas
que tú mismo has creado,
soluciónate
y obtendrás siempre mejores resultados.