Ayer acabé "El pirata Gorgo" y ya veis por qué el libro es especial. Parece ser que J. L. Badal se lo dedicó, en un principio, solo a Laia, y Júlia (su hermana?), se debió enfadar bastante porque el autor tuvo que rectificar su error (en tinta negra a la izquierda). Eso sí, al final salió airoso con esas dedicatorias tan bonitas.