miércoles, 5 de septiembre de 2007

Ll de Llave


Si regalas tan alegremente tu libertad,
si ofreces tan inconscientemente
la llave de tu felicidad
luego no te quejes
de que te llevan por la cuerda floja,
de que vives con un vértigo constante
y de que ya no puedes abrir la puerta
de tu propio bienestar.
No te ahogues en tu propia independencia,
no pienses que porque no tienes
el salvavidas a mano,
ya te has olvidado de cómo nadar.
Quizás no te llamen en el lapso
de tiempo que tu consideras reglamentario,
quizás no te hayan dicho cariño
en la parada de autobús,
puede que no esperaras un desaire
cuando le dijiste que le habías regalado
un viaje romántico para éste sábado,
pero si permites que tu risa
se consuma sólo
porque no se dibuja en su cara
un corazón en los labios,
vas a olvidarte de cómo reír
en un plazo de tiempo tan breve
que se te antoje remota
tu última carcajada proferida
por que sí,
sin que tuviera que haber detrás
el rostro de tu amante,
oculto como el del verdugo.

1 comentario:

  1. ai ca ploru
    ho sé, ho sé tot
    pero se m'oblida
    i ara em fa gràcia lu histèrica que m'he posat...
    ho canviaré, ho aconseguiré
    perquè jo també t'estimo més quan rius i estàs contenta
    gràcies
    :*

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